Una de las mejores cosas que puedes enseñarle a tus hijos es acerca del dinero, ya que esto les ayudará a evitar que en el futuro se vean envueltos en los típicos problemas financieros por los que en un momento dado pasamos la mayoría de las personas.

Esta enseñanza consiste principalmente en aprender a manejar sabiamente los recursos disponibles y aprender a multiplicar esos recursos.

En este tema del dinero muchos padres confunden la idea de enseñar a sus hijos sobre el dinero con la idea de enseñar a sus hijos a ganar mucho dinero, cuando la verdad es que no se trata de cuánto logres ganar cada quincena, si no de la forma en la que administras esos recursos y la visión con la que planeas tu futuro.

Estas son tres ideas básicas sobre el dinero que podemos ir inculcando en nuestros hijos:

1. Nunca gastes por adelantado.

Los grandes problemas financieros de las personas, las empresas y los gobiernos se deben a que no siguen esta simple y básica regla. Nunca debes gastarte el dinero que aun no has ganado ya que así sólo lograrás mermar tus ingresos futuros y convertirte un esclavo del dinero y del trabajo.

En lugar de endeudarte, ahorra para comprarte lo que quieres.

2. El dinero es una herramienta.

El dinero no es malo, ni es algo «que no importa». El dinero importa porque es una herramienta que nos sirve para obtener alimentos, ropa, seguridad, educación, salud y esparcimiento. El dinero también nos facilita el poder ayudar a otras personas. Así que entonces podemos decir que el dinero es bueno si está en buenas manos.

3. Tu puedes generar el dinero que necesites y quieras.

El dinero está ahí; en empleos, en negocios, en inversiones. Debes aprender a generar suficiente dinero y ahorrar al menos el 10 por ciento, después debes invertir estos ahorros en activos que te ayuden a generar más dinero. Esta es la única forma de alcanzar la independencia financiera.

Si en lugar de simplemente darles dinero cuando nos lo piden, incentivamos a nuestros hijos a que encuentren formas de generar dinero, descubrirán su espíritu emprendedor. Todos los niños poseen creatividad, sólo hace falta impulsarlos a tener metas financieras y a alcanzarlas. Y no te preocupes mucho si hacen inversiones equivocadas o negocios sin éxito; los fracasos les servirán de aprendizaje.

Si introduces estos tres conceptos en la mente de tus hijos les estarás dando una valiosa educación que no se da en las escuelas y que les ayudará a alcanzar el éxito financiero.

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