Una de las maneras de alcanzar el éxito financiero es contar con los asesores adecuados en negocios, seguros, inversiones, impuestos, etc. Como dice el padre rico en el libro de Robert Kiyosaki, «Padre rico, Padre pobre»: «una persona inteligente contrata a personas más inteligentes que él«.
Una de estas personas debe ser tu contador. Tu contador debe ser una persona en la que puedas confiar, ya que debe ayudarte a darte de alta en Hacienda en el régimen y con las obligaciones que te corresponden, pero sobre todo, debe ayudarte a deducir gastos para pagar menos impuestos.
Muchos empleados desaprovechan la oportunidad de deducir los intereses de su crédito hipotecario, su seguro de gastos médicos y su ahorro para el retiro, porque no saben que pueden hacerlo, ni saben cómo hacer una declaración de impuestos.
Estas personas pierden grandes cantidades de dinero anualmente que podrían recuperar de sus devoluciones de impuestos.
Por eso es importante, trabajes por tu cuenta o seas empleado, conseguir un contador de confianza, que sea capaz de ayudarte y asesorarte para que aproveches los beneficios fiscales, que de por sí, son muy pocos, y los pocos que hay no se aprovechan por desinformación.
Proveedor de servicios y sitios de internet, budista, esposo, papá, y creador de atracciones de terror!! (No necesariamente en ese orden) 😉